miércoles, 25 de mayo de 2022

Cuando un amigo nos presentó

 


Tu elegancia me persuade al ver tus encantos en la talla de tu primoroso vestido. Cuando bailábamos juntos en aquél salón, tus ojos almendrados me inquietaron pero tu mirada risueña me invitó a preguntarle a mi corazón ¿Qué es lo que escondes mujer? Quizá el aroma de tu cálida belleza que miraban mis ojos pero aun tus manos cálidas entre las mías, me hicieron sentir tu tímida desconfianza.

Pero no lo supiste porque en esa oportunidad, yo te demostré mi afecto con ánimo pronto y en silencio, acaso para que te sientas segura conmigo y no tengas miedo. Me hablabas de tu vida y de tu pasado, aquellos que se perdieron en tus logros, en tus alegrías, en las tristezas que nunca faltaron pero pienso ahora sé que si lo pudiera unir en una melodía, me admirara yo de tu sapiencia al enfrentar el tiempo. ¿Sabes? Han pasado los años y sigues siendo bella, hermosa y transparente como la caída de las aguas que no cambian por nada.

Tu figura recatada me hizo robarte besos, aunque tú ni enterada. En realidad te admiro pero no me es posible hablarte de amor aunque me lo proponga porque tu corazón está atado a un pasado romance que solo las almas nobles lo sellan con las promesas inquebrantables de los recuerdos y así sería imposible convencerte. No importa eso ahora, tú ya lo decidiste por conciencia propia.

Eres una estrella fugaz, alguien especial que brilla permanentemente en mi universo. Yo soy solamente un espíritu libre que te embruja con mil colores y mi aura misteriosa, alguien que te emocionó con el poder de mi alma y de mi fortaleza. Quizás te extrañe en la lejanía de mi existencia, en el confín de los tiempos, porque soy todo y nada a la vez, una ilusión de tus ojos que solo adivinaron un presentimiento cálido que yo no supe comprender...

Me mirarás como un espejismo que acabas de concebir en un desierto al final de la oscuridad más densa y que pronto desaparecerá cuando despiertes dándote cuenta que mi presencia fue etérea, extraña. Tal vez fue el sentir de una rara sensación fue para ti haber sabido mi nombre; pero pienso que fue en la inesperada casualidad que se dio aquella vez en la reunión de aquella noche, cuando un amigo nos presentó…

Roque Puell López Lavalle

Enlace: https://www.youtube.com/watch?v=3r99DIRPE2s&list=RDGMEMRpqX2eKUq0kW97LmkR0R1w&index=18