Cuando los deseos del corazón descansan en los encuentros furtivos, se sabe lo que se anhela porque es la fuerza de la pasión en medio de un torbellino. Las noche es testigo de los encuentros, de las muchas palabras que se dicen y las que nunca se encuentran. Las lisonjas solo viven el momento pero el devenir de las miradas no garantiza el hecho consumado. Unos confunden el amor con con la fantasías de lo inmenso pero ninguno entiende la dicha que une el sublime sentimiento...
Solamente algunos se ilusionan y los otros ya están muertos porque no conocen el amor y simplemente lo condenan. Y la fe que todo lo cree y todo lo soporta solamente alimenta las esperanzas de que alguna vez todo cambiará pero nada es más incierto. Cuando el cauce de un rio crece, está llamado a ser inconstante, nada lo detiene en su camino, nada bueno le es importante. Pero va pasando el tiempo y los desencuentros de uno se van forjando en el otro. Las ilusiones ahora van cambiando en pretextos, los deseos en negaciones, tal vez porque la esperanza se acabó cuando termina el hechizo que alguna vez fue suficiente. No hay otro camino, el cariño se encuentra con la indiferencia y esta se enfrenta con la obligación diciendo que ha sido ultrajada. ¡¡Tremenda la inconciencia!!
Solamente algunos se ilusionan y los otros ya están muertos porque no conocen el amor y simplemente lo condenan. Y la fe que todo lo cree y todo lo soporta solamente alimenta las esperanzas de que alguna vez todo cambiará pero nada es más incierto. Cuando el cauce de un rio crece, está llamado a ser inconstante, nada lo detiene en su camino, nada bueno le es importante. Pero va pasando el tiempo y los desencuentros de uno se van forjando en el otro. Las ilusiones ahora van cambiando en pretextos, los deseos en negaciones, tal vez porque la esperanza se acabó cuando termina el hechizo que alguna vez fue suficiente. No hay otro camino, el cariño se encuentra con la indiferencia y esta se enfrenta con la obligación diciendo que ha sido ultrajada. ¡¡Tremenda la inconciencia!!
No valen las palabras, no hay respeto en lo que se hace, mientras más se espera, más se ignora porque mientras más se sufre, más es la discordia. Lo que un día fue el ahora, hoy se pierde en la nostalgia y en la amargura de las emociones dañadas. Entonces, ¿Por qué tantas ilusiones? ¿Por qué tanto se esperó en los brazos de la esperanza? ¿No era mejor vivir el momento que las grandes distancias? Entonces, recién descubrieron una verdad oculta, en el uno yacía la mentira escondida y en el otro, el ídolo derrumbado. Así, lo único que quedó fue el inmenso vacío de la soledad.
Por eso, así como la muerte no discrimina cuando te escoge, así el ser humano reconoce al final del camino al barquero que lleva su cuerpo por las aguas de la muerte. Entonces, los que fueron la estrella fugaz con inusual brillo, recordaron las palabras, la nostalgia o quizá las ilusiones de los deseos truncados. Se dieron cuenta que se desilusionaron por los tiempos que no habían terminado y por la vida, que no se presentaría como ellos la habían soñado...
A fin de cuentas, todo fueron mentiras luciendo un buen argumento, unas quizá con mucha elocuencia pero otras, fueron sencillamente, apariencias...
Roque Puell López Lavalle
Por eso, así como la muerte no discrimina cuando te escoge, así el ser humano reconoce al final del camino al barquero que lleva su cuerpo por las aguas de la muerte. Entonces, los que fueron la estrella fugaz con inusual brillo, recordaron las palabras, la nostalgia o quizá las ilusiones de los deseos truncados. Se dieron cuenta que se desilusionaron por los tiempos que no habían terminado y por la vida, que no se presentaría como ellos la habían soñado...
A fin de cuentas, todo fueron mentiras luciendo un buen argumento, unas quizá con mucha elocuencia pero otras, fueron sencillamente, apariencias...
Roque Puell López Lavalle